Todos los días los medios y las personas en general nos someten a un bombardeo incesante de ideas y conceptos que buscan programarnos para creer o actuar de la misma forma, para seguir el ideal del colectivo, para agrandar la masa y hacerla ver mas fuerte, imponente de tal forma que resulte avasallante para quienes no compartan esa misma idea.

Vivimos en una constante lucha de contradicciones, por un lado buscando cada quien su propia identidad e intentando verse y sentirse distinto a todos, pero al mismo tiempo tratando de ser aceptados por la mayor cantidad posible de personas, pues persiste la idea que mientras mas personas estén de nuestro lado mas cerca de la verdad o de ser correctos estaremos.

Al final del día esa sequedad de ideas hace mella en nuestras mentes y sentimos el dolor de cada palabra lanzada a nuestro cerebro y que cual gota incesante cae y cae una y otra vez horadando nuestras conciencias y colándose en nuestro ser para integrarse a nuestro acervo, todos nos hablan incluyéndonos en sus creencias, en sus apologías, en sus sueños, como si nosotros por el mero hecho de oirles estuviéremos obligados a creer y ser como ellos son.

Nos dicen, «todos somos pobres» «todos lloramos» «nos están matando» «tenemos una esperanza» «tú sabes que estaríamos mejor con esto o aquello»…. y sin siquiera percatarnos, llenan nuestra mente de culpas insulsas, nos hacen partícipes de su mediocre ideosincracia.

No soy un Robot y no acepto ser programado, no acepto ser como todos, no acepto creer en lo que todos creen, no me interesa ser aceptado, no quiero ir a donde van, no voy a estar mejor con nada ni nadie porque estoy perfecto conmigo,.. No soy un robot

@ISAIJOACHIM